Mis Amigos de Sones y Soneros, después de 22 años regresó Pablo “El chino”
Núñez quien llegaría a Lima – Perú en 1986 con la orquesta del recordado Héctor
Lavoe.
Conversando con mi hermanito Chino recordábamos
ese año:
“Daniel me parece increíble volver aquí a Perú, está
bien chévere, su gente a uno lo recuerda y eso me alegra”.
Una de las anécdotas que recordamos fue cuando
subimos a su habitación ocurrió un hecho jocoso:
“Eso fue tremendo, recuerdas que entramos y que
Jhonny Torres estaba en el baño, contra que grito dio”.
Una de las ironías de la vida fue saber que su
Mamá del Chino había fallecido un día antes de su llegada a Lima, él tenía que
tocar para alegrar al público.
“Si Mamá murió y tenía que sacar fuerzas porque
tenía el trabajo, la gente no tenía por qué recibir una orquesta incompleta”.
Recordábamos como fue esos días, le pregunte por
Víctor Pérez y me dijo:
“A Víctor no lo veo, pero sé que esta malito,
tiene problemas de corazón, está en su casa”.
El Chino me enseño las partituras de los temas
que iban a tocar con Ray Sepúlveda, a continuación lo detallo
“Donde estarás”, “No vale la pena”, “Mascarada”,
“Sin saber”, “Rompe saraguey” como homenaje a Héctor Lavoe, “Bandolera”, “Mi
amor amor”, “Cuando tu vuelvas conmigo” y “El hijo de Obatala” recordando a Ray
Barreto.
Cuenta el Chino que ya está próximo a dar inicio
en su tercer trabajo musical y mantendrá esa línea de salsa para el bailador.
Al parecer los años pasaron por nuestras vidas y
nuestras formas cambiaron, unas canitas, una pérdida de cabello, las arrugas
que aparecen pero la amistad, el cariño de hermanos no se perdió, la sencillez
de este músico perdura y eso hay que resaltarlo, de ello se aprende y se imita,
es una dicha conocerlo.
Comentaba que es abuelo y que es feliz con su
familia, ninguno de sus familiares es músico, que todo lo que tiene es gracias
a Dios, que cuando hay algo que no sucede es porque más adelante viene algo
mejor, su amabilidad se dejó notar en todo momento, la nostalgia de algunos
recuerdos se hicieron presente en un instante pero una sonrisa suya hacia que
pase eso.
“La vida es dura para los músicos, imagínate hay
ocasiones que no hay descanso, pero tenemos que seguir en la brega porque
tenemos familia, hay que aprovechar lo que se tiene, apoyando al que no tiene,
en estos momentos me duele el brazo pero tengo que seguir, tú sabes que en
ocasiones tengo que subir el timbal para que no me afecte este problema de
salud”.
Pablo Núñez “El Chino” dejo un mensaje:
“Bueno mi gente de Perú, gracias por todo, Uds.
hacen que nosotros nos sintamos bien y seguir en la lucha, no es fácil pero
aquí en Perú hay personas como tú Daniel y tu página que apoyan de una u otra
manera el trabajo de los artistas, todavía hay ese calor humano que a uno le
dice sigue todavía hay mucho por dar de uno, solo me queda decirles que estamos
muy agradecidos y que pronto nos volveremos a encontrar con buena salsa”.
Los detalles personales quedan en silencio, pero
lo que si les digo que hay Chino para rato.
Chino en el timbal!!!
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